¿Cuantos pasos necesitas para cuidar tu piel?

Es una buena pregunta que intentaré contestar de una manera generalizada, ya sabes que viendo tu piel es cuando tengo la información, para personalizar los tratamientos.

La rutina facial se debería hacer mañana y noche, y debería ser un momento placentero y agradable, un momento que te dedicas a ti. Por este motivo la concibo con productos botánicos, orgánicos y libre de perfumes de síntesis, porque la conexión con el momento y el placer del ritual va a ser completo.

El primer paso es el limpiador, este no lo podemos saltar, y según tipo de piel elegimos uno u otro.

El segundo paso podrías elegir entre una bruma, tónico o agua floral, es decir, un producto de textura líquida.

El tercer paso, una crema o un serum (en este caso a base de aceites) que te aportará los lípidos que necesita tu piel.

Otra opción: limpiador, serum (en este caso puedes elegir de base acuosa o de aceites) y crema facial.

Otra opción: limpiador, aceite facial y crema.

Y la bruma o agua floral la podrías aplicar durante el día, es el mejor hidratante y aporte de vitaminas, cuando notas tu piel cansada y fatigada a lo largo del día.


Estos tres pasos son los básicos, con los que tu piel va a recibir nutrientes para protegerla, reparadla y nutrirla.

Y aquí le podrías añadir, según piel y necesidades, un contorno de ojos y el solar en primavera y verano, o aplicarte una crema hidratante con protección solar y el paso de la crema ya sería todo en uno.

Tu piel y necesidades del momento lo van a marcar. Ya sabes que lo más importante es escuchar tu piel y asesorarte.

Hay momentos que la piel pide más y otros que pide muy poco, y tenemos que respetarlo.

Por ejemplo, cuando hay una piel irritada, o con erupciones, ya sea de granos, eczemas, son pieles que piden calma. En cambio, si vienes de tomar mucho sol o de hacer mucho ejercicio al aire libre, o de un periodo de mucho cansancio, en estos momentos tenemos que dar a la piel muchos nutrientes, que la reparen y regeneren.

¡Que es importante también! No mezclar muchas marcas, cada una tiene unos principios activos diferentes y si hacemos muchas mezclas la piel recibe demasiada información.

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